Es sentirse disfrutar del tiempo sin limitaciones. Es gozar de libertad en el marco de las reglas prudenciales. Es darle cabida a la opción de elegir sin impedimento alguno.

En ciertos casos, se ve a muchos andar libremente aunque interiormente son presos de sí mismos por qué no disfrutan lo que sienten hacer por temor a los que piensen los demás. En cambio a otros, las barreras no les impiden disfrutar esos momentos de libertad que aun estando encerrados físicamente no se cohíben de darle cabida a sus sentimientos y disfrutar del amor, como se comprueba en la presente gráfica en donde las barreras son contrarrestadas por los sentimientos.En muchos casos, se es apreso de la acuciante conciencia; no siempre del todo, los libertados dejan de ser encerrados, y muchos encarcelados injustamente se hallan libre de conciencia, a estos llamo: presos en libertad.
Por Cesáreo Silvestre Peguero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario